PERPETUUM MOBILE
(Alicia de Larrocha, in memoriam)
Que una mujer muera a los 86 años dista mucho de ser una noticia. Alicia de Larrocha llevaba algunos años retirada después de una carrera larga, llena de música y de éxito, que la había convertido en todo un mito de la interpretación pianística. La más internacional, la más perfecta de cuantos intérpretes de piano le ha dado nuestro país a la música.
Pero la noticia anoche de su muerte me ha dejado un cierto poso de tristeza. En mi recuerdo de esta mujer quedará un recuerdo robado, la anécdota que siempre contaba Eduardo de cómo cuando él tenía siete u ocho años se pasó una tarde maravillosa jugando con un lego o con unos cochecitos debajo del piano de cola familiar mientras Alicia de Larrocha ponía a punto algo de Granados, creo que recordar que el "Fandango del Candil" de la suite "Goyescas", para su concierto en la Asociación de Amigos del Festival.
Recordaré también la impresión que me causó su propia figura la primera vez que tuve el honor de escucharla en directo. Menuda, pequeñita, poquita cosa, como una más de las señoras que hacían ganchillo por las tardes en las terrazas del Sardinero, un poquito cargada de hombros que acababa totalmente encorvada cuando se sentaba y comenzaba a desgranar toda la música que llevaba dentro sobre el teclado. Sobre todo esas manos menudas, gordezuelas, que se enfrentaban a los repertorios más exigentes, a los más imposibles, con una serenidad y una exactitud fuera de toda lógica física.
Su alma estaba enamorada de la música. Mozart, Schumann, Beethoven se contaron entre sus favoritos. Pero se entregó sobre todo a la promoción y la difusión de la música española, nuestro repertorio que vistió con ella de gala y se paseó por los más grandes salones de concierto del mundo. Scarlatti, Granados, Falla, Albéniz, Halffter le deben en parte a Alicia su mayoría de edad.
No es este un momento de despedida. Porque su música siempre estará con nostros. Pero sí un homenaje del Santander posible para una mujer esforzada, artista y singular que supo amar la vida para hacer nuestros tiempos un poco más felices.
Gracias, Alicia.
5 comentarios:
Cuando lo leí en tu facebook, puse en la radio 'La Campanella' interpretada por ella. Genial. Bueno, eso es lo bueno de los artistas. No se mueren del todo. Ahí está su obra para siempre.
Circula por ahí una versión preciosa y exacta de La Campanella en las manos de Alicia de Larrocha. Esa es una de esas obras imposibles que uno no es capaz de entender cómo fueron posibles en unas manos tan escuetas.
Mis hijos han tenido la suerte,y yo también,de verla en el Villamarta.No me creía la energía que desprendía esa señora elegante.Descanse en paz.
Imprescindible su Mozart, cuya música creo que amaba por encima de cualquier otra.
Me encanta que consideres español a Scarlatti(Domenico), haces bien ;-). Uno es de donde pace. Nunca he comprendido por qué apenas se habla del extraordinario esplendor cultural de la corte de Fernando y Bárbara.
Descanse en paz Alicia, que siempre rozó, con sus dedos, ese otro lado que es la música; descanse en paz Alicia, ahora sí, al fin al otro lado del espejo.
De hecho, Elena, no sólo es que Domenico Scarlatti viviera mucho tiempo cerca de su alumna dilecta Bárbara de Braganza, primero en Portugal y luego tantos años en Madrid. Es que nació en el Reino de Nápoles cuando el Reino de Nápoles era todavía parte de las posesiones españolas.
Pero tienes razón, parece que haber tenido con los primeros gobernantes de la dinastía Borbón un foco cultural de primer orden (luego vino lo que vino y llegamos a lo que llegamos ejem) nos avergüenza. Lo mismo es que no les gustaban los toros y disfrazarse de majas ...
Ágata: en efecto, llevaba dentro una energía que la transformaba sobre el escenario y nos transformaba a quienes la escuchaban. Afortunados sois, como lo soy yo, porque habéis tenido cerca a una inmortal :)
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