¿Y SI SECUESTRAMOS A LA UIMP PARA QUE SE QUEDE?
Anoche estuvimos Glendamaría y yo en la Plaza Porticada disfrutando de esa fanfarria loca y explosiva que fue la Orchestre International du Vetex. Una noche con un público variopinto y plural en el que compartíamos espacio desde músicos profesionales o culturetas sin fronteras (cómo se lo pasó la simpar Marisa Samaniego) a jóvenes alternativos con una forma de bailar tan particular como carente de sentido rítmico, desde estudiantes de español a eseteuves de edad avanzada. Unidos por el denominador común de la música y la alegría.
La Universidad Internacional Menéndez Pelayo fue uno de los grandes inventos de Fernando de los Ríos y un entorno de pedagogos vinculados a la Institución Libre de Enseñanza (recordemos que los Estatuos de la ILE se redactaron en un puebluco de Cantabria, en la casa de Augusto González de Linares) y desde entonces supuso un foco de debate, inteligencia y cultura que ha venido inundando los veranos del Santander posible. Etapas diferentes han dejado huellas diferentes, pero destacaría momentos como los años de la II República, nada menos que con Pedro Salinas y Blas Cabrera como rectores, donde la península de La Magdalena acabó siendo una segunda casa de la Generación del 27. O los años de Santiago Roldán, donde la actividad cultural complementaria llenó Santander de modernidad y hasta de movida (Siniestro Total y Os Resentidos en un encuentro titulado "La movida gallega: chove sobre mollado"). O la personalidad abierta y dinámica de Ernest Lluch, a quien se ha recordado con cariño y agradecimiento este verano de 2008. Y me gustaría añadir que los años presentes, de Salvador Ordóñez y su equipo, que han vuelto a apostar por la visibilidad, por compartir y fomentar más que nunca los vínculos entre la UIMP y Santander, generando lugares de encuentro fascinantes y desplegando todo un abanico de actividades culturales abiertas para profesorado, alumnado y ciudadanía.
Cursos y actividades han centrado la atención de estos meses de verano, desde la inauguración en junio hasta los últimos estertores de la programación que estamos viviendo esta misma semana. Cursos plurales, donde se han tocado centenares de cuestiones y se han tocado con rigor, desde esa mentalidad abierta al debate y al intercambio que dio sentido y origen a esta peculiar institución académica.
Quiero resaltar que la programación cultural supera el toque provinciano que tantas veces tiene la nuestra propia, la que siempre programa lo mismo y a los mismos y difícilmente sale a buscar nuevos paisajes (con muchas, grandes y destacadas excepciones), ese homenaje a la caspa que tendría su punto cimero en el decadente y decaído FIS. Y tal vez por eso, por esa ventana a nuevos lenguajes y nuevas voces, por esa mirada plural, ha despertado en algunos medios y opinantes del final del verano críticas infundadas, esas que no se hacían cuando la UIMP era un monográfico popular. Destaca un artículo reciente de un narrador leonés con responsabilidades culturales en Santander, en el que se pregunta por qué tantas voces critican al Festival Internacional y no atacan con saña a esa embajada zapaterista que él ve en la UIMP, donde hasta traen teólogos punto menos que malvados. Y rojos, muy rojos. No estoy seguro de que Rosa Díez, Savater, Fernando Sebastián, Vargas Llosa y tantísimos otros estuvieran de acuerdo con ser considerados parte de las hordas zapateristas. Pero es que el mero hecho de que en los foros plurales de la UIMP hayan podido hablar el doctor Montes, un par de ministros o Eduardo Mendicutti ya resulta incómodo para una caverna que al parecer necesita del monopolio para subsistir.
Pero las Veladas Poéticas, los Martes Literarios, el programa de actividades escénicas, la Muestra de Cultura Urbana, el Festival de Música Negra, los ciclos sobre derechos humanos y sobre la historia de la UIMP, el ciclo teatral La Alternativa, ... nos han traído a este Santander tantas veces melancólico y amodorrado muchas tardes y noches de luz.
Así que propongo que un comando ciudadano secuestre a la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en pleno y la integre en nuestra ciudad, para seguir alumbrando modernidad, diálogo, crítica y aire limpio.
A ver si ensanchando miradas somos capaces de amarnos casi tanto como lo que nos proclamaron Love of Lesbian a finales de agosto en mi querido recinto de Las Llamas. Acompañado, cómo no, por Marlene y David (el sector EMO y el famoso dúo Las Manteca Rancia no resistieron tanto humor jeje).
9 comentarios:
¡AAAAAAAhhhhhhhhhhh!.
Cómo mola, Ruka, cómo mola.
Llevo meses enganchada a "Me amo", seducida del todo por su franqueza, su coraje, su desparpajo y sus muchas y profundas verdades. Y musicalmente me parece la leche.
...Pero no conocía la de Marlene, y ya nada será lo mismo tras oírla... Jajaja, grandiosa.
Un placer compartir "Pollinis", "Sokolofes" y "Loves" of lesbians.
En fin, música.
jajajaja, yo no los conocía pero me habían hablado de ellos y bueno, el concierto fue genial.
Creo que empezaré a acompañar mis posts con chifladuras indies y otras jajajaja
...en general estoy de acuerdo con tu artículo sobre la UIMP... exceptuando, una vez más, en lo que tiene que ver con la así llamada "música clásica", a la que la UIMP se acerca de soslayo... "secuestrada" por la escuela Reina Sofía y cía...
En realidad creo que estamos de acuerdo también en eso, jajaja: te habrás dado cuenta de que lo relativo a la Mecenas Inversa y sus Verbenas no aparece referenciado en los puntos de interés de actividad cultural de la UIMP. Espero que un día se den cuenta y los lunes clásicos se liberen de corsés y cambien de planteamiento hacia, por ejemplo, un ciclo de jóvenes intérpretes, o un pequeño festival de lied o música de cámara o ... miles de posibilidades.
Saludos
Querido amigo Reg... Rukaegos, aunque llevo tiempo leyendo este espacio con regularidad, hasta ahora no me había animado a intervenir, pero es que no comprendo como no se aprecia suficientemente a ¿un NARRADOR leonés?
Yo pensaba que era la reencarnación de D. Alonso Quijano, o está en ello.
Creo que un "poeta cántabro", Luis Malo (cuya obra no aparecerá nunca en QVORVM) podría realizar un sabroso análisis del "pensamiento" de tamaño leonés.
... a seguir soñando con un Santander posible.
Ya puestos te envío esta dirección en la que se puede leer lo que pasa en un lugar llamado Santander, pero cuyos hijos no son santanderinos, sino santandereanos.
http://lapipademagritte.blogspot.com/2007/06/la-cultura-en-santander.html
Digamos que Luis Malo es corresponsable con uno de los líderes de UPD de Cantabria, Mario Crespo, de cierto libelo de (malos) sonetos que tampoco me dejan sentir mucha simpatía por el interfecto. Pero allá él, es bueno poner distancia de según qué gente.
Gracias por el blog de los santandereanos. Siempre he tenido curiosidad por saber cómo aún no hemos materializado un hermanamiento cultural y social con Bucaramanga y Cucuta, pero todo se andará, digo yo :)
;-) sí que me había dado cuenta de la "ausencia" de tus loas por la música culta a la UIPM, merecidas en otras parcelas no secuestradas.
Lo peor de todo, Orfeo, es que por estos lares y resto de solares patrios la gente sigue pensando que en Cantabria somos afortunadísimos por todo el dinero que la doña aporta para la música (sic). Qué difícil que entiendan que no sólo no da, sino que se lleva muchos dineros públicos que impiden el crecimiento de la música, su enseñanza, su difusión y que "gracias" a su "mecenazgo inverso" acabaremos en el analfabetismo musical.
Sin olvidar que tiene su parte de responsabilidad en la aplicación del Principio de Peter al Fraile Infinito, manteniéndolo en su nivel de incapacidad contra viento y marea.
Publicar un comentario