VERANO 2008: COMIENZA EL ESPECTÁCULO
Ya presentó el inefable Consejero de Cultura de la Cosa Autonómica los fastos veraniegos en Madrid, con buenas, malas y hasta peligrosas compañías. Desde Emma Ozores a Paloma O'Shea, desde Gutiérrez Aragón hasta el Fraile Infinito.
Sigue, pues, en marcha la leyenda urbana de la Atenas del Norte (vaya que tuvo que ser cutre Atenas si tenía algún parecido con nuestra falta de proyectos, de imaginación, de sensatez y de estabilidad). Y púsose en marcha anoche con el concierto inaugural del ciclo vinculado a los Encuentros de Música y Academia.
Cada vez tiene uno más puertas cerradas para hablar de música o ejercer la crítica. Cosas de las diplomacias vaticanas y mafiosillas. Pero mientras no cierren esta ventanita al mundo que es mi Santander posible, no he de callar por más que con el dedo ... Uys, que ya me puse en vez de las gafas los quevedos. Sigo.
Los Encuentros de Música y Academia tienen algunas cosas buenas y algunas malas. En esta Cantabria nuestra, a veces madre, siempre madrastra (vaya, ahora se me salió el blas por el otero) es obligatorio celebrar y mortal de necesidad recordar las malas. Pero es que me puede mi lado oscuro (y así me va, jeje). Creo, sinceramente, que Paloma O'Shea y sus proyectos musicales merecen el reconocimiento de la sociedad cántabra. El Concurso Internacional de Piano de Santander ha ido desarrollándose con estabilidad y ambición. Todavía no ha dado ese gran pianista que ojalá amanezca algún día, pero seguimos buscando. Y de nuevo este verano vendrán unos cuantos jóvenes cargados de talento y de ilusión. Mucho chino, por cierto. ¿Será que con el año olímpico y el gigantismo económico del Oriente toca enviar el premio a la Gran Muralla? Hagan sus apuestas.
Los Encuentros comenzaron como simples clases magistrales al uso. Demasiada oferta para individualizar la santanderina. Así que acabaron transformándose en una especie de festival de cámara que recorre múltiples escenarios a lo largo y ancho de la región, con recitales en los que profesores y alumnos, maestros y los que lo serán, comparten con el público su amor a la música. Frente a tanta voz como por estos lares dice "Ciclos no" "Especialización no", los Encuentros han hallado una fórmula personal a la que cada año se incorpora un tema u homenaje: ciclos dedicados a Sofia Gubaidulina o a John Corigliano (con presencia de los dos grandes compositores), año de los cuartetos, esta edición Bach ... Y nos aportan muchas horas de música.
El lado negativo, para mi gusto, incluye dos fenómenos. El primero, lo bauticé hace tiempo como "mecenazgo inverso". Una entidad financiera de las primeras en el nivel internacional provoca una iniciativa cultural para la que luego pide (y a veces semiexige) dineros públicos. Falla lo del mecenazgo en España, pero ¿no debería ser al revés?¿no deberían ser las corporaciones forradas las que inviertieran una parte de sus activos en la cultura? Claro que no tiene culpa la impulsora de los proyectos, que aporta iniciativa, amor por la música y estrategias de trabajo, sino quienes se rinden a sus pies obnubilados por la gloria vana y el oropel vacuo (desliz luthier, sorry) y prefieren afianzar fortunas, nombres y famas ajenas que trabajar desde la base y desde un concepto cultural más abierto y más plural.
El segundo, la inversión pública en las iniciativas musicales de la Fundación Albéniz y predios vecinos está convirtiendo nuestro propio granero musical en un inmenso baldío. Ahora el Ayuntamiento de Santander y el Gobierno de Cantabria invertirán muchos dineros en una Escuela Infantil de Élite (si la Convención Internacional de Derechos del Niño y San Dominguito Savio no lo impiden). Pero seguimos sin tener un Conservatorio Superior en Cantabria. Seguimos financiando conciertos y becas de excelentes estudiantes de todo el mundo. Pero los estudiantes (y los músicos ya formados) excelentes de Cantabria, que también los tenemos, no tienen dónde profetizar en su tierra. Así que escuchar a Miguel Trápaga, Marimar Doval, Luis Aracama, Orfi Saiz o Manuel Lanza (y muchos otros) pues ... complicadillo y marginal. ¿No deberíamos pensar un poco en ellos?
Como fuere, anoche la Orquesta de los encuentros interpretó bajo la dirección de Vladimir Ashkenazy la Titán de Mahler (bastante bien) y el Concierto para violín de Tchaikovsky (menos bien) con una jovencísima solista, Mayuko (mira que suenan cántabras las japonesas) Kamio. Prometedora si encuentra sonido y alma en su impecable y excesiva técnica.
Hemos dado entrada a nuestro verano musical. Bienvenido y esperemos que con algunas noches grandes. Os iré dando cuenta de mis experiencias por estas sufridas y virtuales páginas.
Y hablando de músicas. Bien está que la Reina Doña Sofía sea aficionada a la música. Bien está que deba someterse por su función institucional a los ritos iniciáticos de cada anfitrión oficial. ¿Pero era estrictamente necesario que la UIMP castigara sus oídos soberanos con la Salvé en los actos de ayer? Me tengo yo por más bien republicano, pero de ahí a torturar a Doña Sofía ... Alguien debería ser procesado por Alta Traición y Crímenes de Lesa Majestad, ¿no os parece?
4 comentarios:
Bueno, corazón, tú y yo ya hemos hablado de estos fastos repetidamente en privé, de modo que ya sabes que mis opiniones coinciden al cien por cien con las tuyas. Lo de la "Coral Salve-séquienpueda" es de juzgado de guardia. Creo que se equivocaron de público, en todo caso. Si los hubiera escuchado Bush, se los llevaría a Guantánamo para machacar bien a los presos antes de que le cierren la base. Endilgarle eso a la Reina ha sido un golpe bajo, como si no tuviera bastante con la Leti :-)
Lo de los Encuentros, mención aparte de la financiación -que también es de juzgado de guardia, por no decir bandolerismo a mano armada-, es irregular todos los años, como por otra parte cabe esperar, dadas las características de la cosa. Pero todos los años tenemos al menos la oportunidad de escuchar repertorios de cámara e inusuales (qué bien este año la proliferación de Bach y Messiaen, por ejemplo), lo que ya es un auténtico triunfo... dado que en el FIS invariablemente escuchamos lo mismo y a los mismos año tras año. Y no hablo más del FIS porque me embalo -ya llegará la hora, jeje-.
Besos.
La verdad es que con el fraile infinito, el consejero infinito y las andanzas infinitas de toda una conveniente corte de los milagros, uno ya ha desistido de toda esperanza.
Menos mal que las comunicaciones fueron mejorando y uno puede encontrarse con la Cultura, la de verdad, en Bilbao, Madrid o Londres.
Y como bien dices, ya llegará la hora de regresar a la aldea gala para retransmitir nuevas de su conocido Encuentro Internacional de Bardos.
Jajaja, �fue tan horrible lo de la UIMP...?.
En fin, sigamos so�ando con int�rpretes valientes y con gestores perfectos (los adjetivos pueden intercambiarse)porque la m�sica existe y no habr� quien nos la arrebate.
El director del fatídico coro (tb director del Festival Internacional de Santander y aquí, para amigos y enemigos, Fraile Infinito o Frailonix si me voy a la aldea gala) dijo una vez "lo bueno de mis cantantes es que ni saben música ni saben técnica vocal y por eso son tan naturales cantando". ¿Hace falta que te diga algo más sobre el sonido del conjunto?
Jajaja, pero tienes razón. La música, como la lectura, son nuestros privilegios de seres libres: No pueden quitárnoslos.
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