Sabía que entre las muchas vueltas y revueltas que la cabeza me había dado este Orgullo LGTB 2013 y que compartí con vosotros en el artículo anterior olvidaba alguna importante. En realidad olvidaba más de una, al menos dos de suficiente importancia a mi gusto como para continuar con la matraca.
7. Que la configuración de un Orgullo marca blanca , sin contenidos reivindicativos o ideológicos que puedan molestar a los menos rancios de entre los peperos permita la proliferación de concejales en abierto y de alcaldes de tapadillo en busca de la foto, no debería hacernos olvidar otras presencias y ausencias. Tres son los partidos con representación política en el Ayuntamiento de Santander. Por las casetas se vio, vi, al portavoz del PRC. Muy a última hora, y cuando yo había ya denunciado la ausencia del PSOE en las redes sociales (aunque no creo que tenga nada que ver mi queja, empiezo a tener un poco de complejo de Casandra), tropecé con la portavoz municipal del PSOE. En cuanto a los regionalistas, ninguna duda sobre Fuentes Pila y su actitud ante las personas lgtb. Bienvenido a los espacios públicos de esta guerra, aunque no olvidamos tampoco que no siempre su partido ha sido tan cercano. Por su parte, el PSOE parece olvidar su papel esencial en la igualdad civil de las personas lgtb, aunque quedaran pendientes algunas cuestiones importantes en lo que a la transexualidad se refiere, nadie cuestiona hoy, creo, la valentía del gobierno de Zapatero. Pero ojo, si alguien va a considerar que esa valentía es la salvaguarda para el resto de la historia, alguien está sin duda muy equivocado.
Como suele ocurrir, la conquista de los derechos cierra una carpeta y abre un camino. Lo que viene a significar que la gratitud es eterna y temporal a un tiempo. El día a día de nuestras vidas se ha ido acomodando a esa dignidad civil que llegó con matrimonio y adopción, además de otras medidas. Y aunque yo soy de los que están seguros de que Gallardón tiene claro que si hay que crear una nueva cortina de humo contra las impresentables decisiones del gobierno popular esa cortina podría serlo la reforma del Código Civil, para limitar lo conquistado en aspectos sensibles que resulten simpáticos al facherío ultra-religioso, en este momento lesbianas y gays viven su realidad cívica y afectiva desde la igualdad. No estar al lado en momentos importantes es hacer pública declaración de indiferencia. Si el PSOE de Santander va a dejar que otros se acerquen cuando ellos se ausentan esperando seguir siendo un referente histórico de las personas lgtb no va a garantizarles muchas simpatías. Ellos sabrán, porque no es la primera vez en que se hace sentir esa ausencia.
8. De hecho, hace un par de años, en un 28 de junio especialmente lluvioso, andaban las fuerzas progresistas dedicadas al estado de la región. ¿Por qué convocar ese debate largo e importante en una fecha de movilización importante para una parte de la sociedad? Visto lo visto, para dejar que la única presencia política aquel año fueran de nuevo los concejales del PP. Y dos caras dos del mundo sindical. Porque esa ausencia que reprocho al PSOE ha sido intensa y fuerte en una buena parte de los movimientos sociales a la izquierda en nuestra ciudad y nuestra región. Hemos contado con sus firmas (con casi todas) para nuestras convocatorias y manifiestos. Pero a la hora de la verdad, cuando hemos salido a la calle para formar arcoiris ante el Ayuntamiento, o sólo para leer manifiestos y proclamas, repartir información, costaba encontrar sus rostros entre la no muy nutrida concurrencia.
Recuerdo en tiempos medio lejanos, cuando yo andaba por la dirección federal de la FELGTB, haber escuchado una reflexión triste a una de las referentes del movimiento lgtb de nuestro país, con motivo del Foro Social de Madrid: "Nosotr@s estamos allí hora tras hora, escuchando a cada ponente, cada problema, tratando de aprender y de comprender, tratando de aportar en los debates. Cuando nosotr@s tomamos la palabra, los demás se van a la cafetería o al baño".
Puede que por eso la Comisión por el derecho al aborto de Cantabria decidises convocar una manifestación en defensa del derecho de las mujeres a decidir sobre su maternidad, que yo apoyo, justo el día 28 de junio, justo a la hora de la lectura del pregón de la convocatoria de Tetuán. Tradicionalmente, los colectivos lgtb han apoyado ese derecho a la elección libre, desde unos claros valores. Pero esta vez no tocaba estar allí. Hay muchos días, muchas horas, muchas posibilidades para cada convocatoria. Y no voy a negar que me molesta que precisamente nuestro día, un día más que claro para el calendario, se utilice por quienes deberían estar con nosotros para otras reivindicaciones, por justas que me parezcan.
No quiero ni pensar qué pasaría si ALEGA u otro colectivo lgtb decidiera convocar una concentración contra la homofobia en las aulas el 8 de marzo o una manifestación en favor de la gratuidad de la reasignación de género para las personas trans el 25 de noviembre. Pero sé que no sería bien recibida la iniciativa.
Sí, a lo mejor peco de sensible, pero me duele pensar que para una buena parte de la sociedad española, incluyendo una parte de esa que es más sensible a los derechos, a la igualdad, a la dignidad de las personas, sigue pensando que gays, lesbianas, bis y trans somos el entramado decorativo, que al fin lo nuestro no es tan importante. Sin enterarse, sin querer enterarse, de que los derechos lgtb son derechos humanos. Y que la lucha por cualquiera de estos derechos es un trabajo en favor de todos.
Hubiera querido estar en esa defensa de la ley sobre la interrupción del embarazo firmada por el ejecutivo de Zapatero y afectada de gallardonitis aguda. Pero no voy a hacerlo un 28 de junio, no en el aniversario de Stonewall, no. Y lo mismo tampoco lo hago en la próxima si se empeñan en explicarme que mi lucha no es la suya.
1 comentario:
Siempre es un placer leerte, y aquí también estás en mi opinión muy acertado.
Me parece REPUGNANTE que la carcundia mundial aún niegue tal vez el derecho más fundamental de los Derechos: el de AMAR a quien te plazca o quien te toque. Si no fuese trágico sería ridículo.
Saludos.
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