PROPUESTA DE LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL DE ESPAÑA
Anda Rajoy triste y cabizbajo por la envidia que le reconcome cuando contempla a los deportistas de otros países cantar sus himnos, mientras los españoles tienen que escuchar calladitos y las huestes bárbaro-hooliganescas aúllan chunda, chunca, tachunda chunda chunda ... (póngase música del Himno Nacional Español por favor). Así que se ha sumado a las iniciativas de corte igualmente melancólico-nacionalista del Comité Olímpico Español y de la SGAE (No al canon de préstamo en bibliotecas, para ir empezando). En el caso de la SGAE, supongo que tendrán ya decidido quién va a forrarse cada vez que se interprete nuestro Himno en cualquier parte del mundo mundial. En el del COE, imagino que los motivos son menos crematísticos y más afines a los de la envidia.
No acabo de entender por qué es tan doloroso para algunos políticos y algunos deportistas permanecer un par de minutos con la boca cerrada. De hecho, muchos españoles respiramos tranquilos cada vez que se produce la obligada y protocolaria oclusión del aparato fonador. No acabo de entender por qué precisamente quienes se pasan la vida pregonando lo importantes que son las tradiciones (desde el toro de la vega a la familia tradicional), estén obsesionados por transformar en hit político la música de una antigua marcha militar (que nunca fue himno) y que por mor del destino transformóse un día en música oficialmente representativa del Reino de España.
Aunque sí tengo claro que alguna relación guarda la melancolía nacionalista de Rajoy con la obsesión de su partido y sus huestes por apropiarse de todo lo que huela a España. España es suya, como la calle lo fue de Fraga. Suya es la bandera, suyo el himno, suya -pero menos- la monarquía. Y así, en la estela de ese nacionalismo que tanto critican pero tan poco ven en el ojo propio, se produce una identificación emocional entre lo español y lo popular, de manera que quien no sostiene o comparte su visión sobre el trasvase Ebro-Besaya, la protección de la cigüeña negra en Ávila o los cursillos de encaje para madres solteras en Camariñas o cualquier otro rifirrafe del momento, simplemente es un traidor, un mal español. Vamos, que en cualquier momento, rebautizarán a este nuestro solar como Esppaña.
Pero el caso es que al pobre Rukaegos le ha conmovido el dolor de Rajoy. Y ya que el ilustre registrador quiere llevar en su programa electoral una letra para el himno, una letra que en cualquier caso tiene que mencionar las palabras España y Monarquía, quien este blog sostiene ha decidido proponer su propia versión del himno.
Ruégase a los sufridos lectores que intenten cantar en voz alta y solemne, ya que la melodía hímnica es de todos conocida.
Nótese que para su mejor y más vibrante entonación, debe ponerse la mano en el pecho y aportar un plus de sensualidad en el tercer verso. Que el "hey" del noveno debe sonar a Julio Iglesias (gloria nacional donde las haiga, oiga) y falangista el "santa tradición" del décimo. Por supuesto, el "Olé" del verso catorce debe más gritarse que cantarse. Y el repetido nombre de la patria con que concluye la propuesta, ha de decirse con "s" gutural y acento en la "p" (más o menos así: Ejjp``paña). Espero que os guste, y quién sabe, tal vez acabemos cantándola de manera solemne y oficial.
Esta España
que rojos y masones se quieren cargar
es mi debilidad.
La monarquía es tan fina y fetén
que queda supermona en el papel cuché.
Es la España
de toro y pandereta, de pisto y chotís
la que me pone a mí.
Hey, camarero, paella "pa tós"
regada con sangría y santa tradición.
En España
no puede tener sitio quien no piense así,
yo no lo quiero aquí.
Todos a una gritemos ¡Olé,
Ejpaña es del pepé, Ejpaña es del pepé!.
10 comentarios:
Arriba Ejpaña. Es una letra fantástica. Pero creo que Revilla debería presentar una moción para que la letra del himno de España incluya la palabra Cantabria.
jajajaa hombre ten en cuenta que en la segunda estrofa viene lo de "España me pone" ;) Yo creo que debería estar contento.
Y donde puse hombre, quería poner mujer, claro.
Si alguien conoce un himno nacional, una bandera patria, una frontera política o una religión que haya servido para algo más que enfrentar, que levante el dedo (no el dedo acusador, que suele estar en las manos de los “patriotas”).
La Constitución de 1978, que rechacé expresamente con mi voto, no menciona por ningún lugar al himno, por lo que no parece que sea excesivamente necesario, sobre todo si tenemos en cuenta el historial político acumulado hasta entonces por algunos de los “padres de la patria”.
Hay que tener en cuenta, además, que la iniciativa parte de dos organismos cuya razón de existir es cobrar sin trabajar; contando, eso sí, con el apoyo de los dirigentes de un partido político que sólo entiende su país como aquel en el que defraudan vía impuestos y mangonean como vienen haciéndolo sus familias desde hace varias generaciones.
No recuerdo haberme estremecido nunca al oirlo, ni musicalmente, como me puede pasar con algunas arias de Puccini; ni por un “sentimiento de identidad nacional”. ¡Qué le vamos a hacer, uno no es perfecto!
Por cierto, y al margen de las evidentes bondades de la letra propuesta: España podría tener un himno realmente bello. Se conoce como "Himno de Riego", y cumple todos los requisitos de tales piezas musicales. Una letra encendida y apasionada que reivindica la historia y el espíritu común, una música alegre, pegadiza y no exenta de solemnidad y unos arreglos oficiales en su día nada menos que de Óscar Esplá y revisión de la letra de Don Antonio Machado. Ahí ej ná.
Muy buena entrada. ¿Y esto?: "No acabo de entender por qué es tan doloroso para algunos políticos y algunos deportistas permanecer un par de minutos con la boca cerrada. De hecho, muchos españoles respiramos tranquilos cada vez que se produce la obligada y protocolaria oclusión del aparato fonador.", es divertidísimo.
A mí me parece bien tener un himno sin letra, y no sólo bien, sino incluso muy digno. En general, este tipo de composiciones que enaltecen a la patria suelen tener por denominador común letrillas llenas de tópicos que en poco resumen la supuesta dicha -eso según cada quien- de sentirse perteneciente a una nación u otra. La verdad es que tampoco el Himno de Riego me parece una notable excepción.
Por otra parte, ¿quién piensa que por no tener letra es una composición menos meritoria que una que sí la tiene? A mí particularmente no me gusta demasiado el himno español (vamos, que no me parece "bonito"), y quizá por eso lo veo mejor en mudo. Pero claro, no todos podemos sacarnos un Verdi de la manga...
Coincido contigo, como casi siempre. En efecto, no acabo de ver el problema al himno sin letra. Entiendo la postura de la SGAE porque la ocupación del ladrón es la de encontrar nuevos territorios en los que amasar. Para el resto de "letrasuplicantes" me gustaría añadir dos cosas. Una es que, tan respetuosos que son con las tradiciones, respeten ésta´, que así es la rosa. La otra, creo q todo esto viene con la incapacidad del humano actual de permanecer dos minutos seguidos ocupado en prestar atención a cualquier cosa. El silencio obliga a pensar, a mirar hacia dentro y a encontrarse con uno mismo. Y creo que a una gran parte no le gustaría verse de veras.
Además, el origen de toda la nube de humo procede del mundo de los hooligans vociferantes. Esos que respetan tanto el himno, Ejpaña, su bandera y sus símbolos, que no dudan en enarbolarlas como insulto contra los demás, en regarlas de vino y vómitos borrachoides, en pintárselas en el careto y en inventar su propia letra para ulular citius, altius, fortius: la ya clásica del Chunda Chunda Tachunda chunda chunda, chunda, chunda chú.
Que bien mirado, sería otra opción.
Ah, yo me apunto al himno de Riego.
Me apunto a tu himno, ahora leyendo a Ana, igual está mejor si letra, o no?
Muy muy muy bueno!!!
Yo me la estudio para el próximo encuentro.
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